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Ministerio de Cultura no responde

Mediante un editorial publicado en El Universo el pasado sábado 7 de abril culminamos la larga —y evidentemente infructuosa— espera por la respuesta del Ministerio de Cultura y Patrimonio (MCYP) a nuestra petición realizada en enero del presente año. A falta de respuesta, cualquiera podría suponer que los documentos requeridos no existen formalmente, y que a esa Cartera del Estado no le interesa cumplir con la Ley de Transparencia, peor aún con los actores culturales.

Comité editorial

Paralaje.xyz

MINISTERIO DE CULTURA NO RESPONDE

Por Ana Rosa Valdez

Editorial publicado originalmente en diario El Universo el 7 de abril de 2018

El pasado 27 de marzo en la Columna de Bonil apareció la siguiente pregunta:  “Van 69 días que el Ministro Adrián Sama no da información. ¿Qué otros funcionarios incumplen la Ley de Transparencia?”. En el actual gobierno más de uno: El 16 de enero solicitamos -conjuntamente con Rodolfo Kronfle Chambers- al Ministro Raúl Pérez Torres información sobre el traslado de bienes culturales desde el Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo (MAAC) de Guayaquil a Quito para integrar la exposición permanente del “Museo Nacional”. Mediante una carta pública difundida en el portal Paralaje.xyz —espacio autónomo de crítica de arte y debates culturales— enviamos nuestro pedido amparados en la Ley de Transparencia. En las vísperas del plazo que concede la ley nos llegó un oficio solicitando subsanar cuestiones de forma en nuestra petición, lo cual hicimos de inmediato. Frente al silencio evidente de los días posteriores nos comunicamos con varios funcionarios del área jurídica y el gabinete ministerial solicitando la gestión de la respuesta. Pero, a pesar de haber atravesado este laberinto burocrático, ni el Ministro Pérez Torres (el onceavo ungido en esta cartera desde su creación en el régimen de Correa) ni ningún funcionario ha emitido una contestación.

Pareciera que la transparencia y el diálogo con los ciudadanos (menos aún con especialistas) no es prioridad en esta Cartera del Estado. Ante ello, me pregunto ¿existen los documentos que solicitamos? Nuestra petición incluía el listado completo de obras y documentos que evidencien el préstamo temporal de las mismas (que garanticen que no se trata de un traslado permanente), el guión museológico con firma de los autores y detalles de su contratación, y las políticas culturales y normativas institucionales que amparan la gestión de préstamos y manejo especializado de piezas de arte. También requeríamos información sobre la inauguración de una muestra histórica permanente en el MAAC, similar a la que se prevé abrir para el trasnochado concepto de un “Museo Nacional” en la capital; los planes y cronograma de reparación de infraestructura del MAAC (ya que las soluciones parche que ha dado el MCYP hasta ahora no son suficientes frente al deterioro general del edificio); y, las cifras del gasto público en cultura realizadas desde la aparición de la institución en el 2007.

¿Por qué se veta el acceso a esta información? ¿De qué “diálogo ciudadano” hablamos cuando a los actores culturales se nos excluye de los procesos institucionales relevantes? Desde su fundación, el Ministerio de Cultura no ha logrado consolidarse institucionalmente en su rol de crear e implementar las políticas culturales del gobierno central. Basta observar la debacle de los museos, archivos y bibliotecas para preguntarse a dónde fueron a parar los millones de dólares “invertidos”. En el marco de las nuevas medidas económicas, si este ministerio desapareciera o se fusionara con otra entidad, ¿alguien lo extrañaría? ¿no sería mejor y más sencillo que en lugar de insistir en centralizar la gestión cultural se dote de autonomía administrativa y financiera a todos los entes que concentra y supervigila? El fracaso del modelo implementado durante más de una década ha sido estrepitoso, y la falta de transparencia más que sospechosa.

Foto de portada: Guillermo Morán

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